Este documento intenta aclarar con datos científicos, las implicaciones para la salud, que tiene, vivir cerca de una planta como la que se quiere construir en Loeches.
Las informaciones contenidas en esta hoja, se basan en referencias científicas cuya fuente se indica al final. Por el contrario, cuando los empresarios de la industria de la incineración afirman que “las incineradoras nunca han matado a nadie”, no pueden aportar ningún estudio epidemiológico que avale semejante afirmación y suelen apoyarse en estudios financiados… por la industria incineradora [1] .
En buena lógica, podría temerse que la dispersión de sustancias cancerígenas provocara cáncer en los vecinos, y la ciencia confirma este temor. Un estudio epidemiológico realizado por la Facultad de Medicina de Besaçon sobre la incineradora de la ciudad concluye que “el riesgo de desarrollar un linfoma maligno no Hodgkiniano es 2,3 veces superior para los individuos que residen en la zona más expuesta a la caída de dioxinas que para los individuos que residen en la zona menos expuesta” [2] . Otros estudios confirman estos resultados [5] . Pero aun cuando vivamos lejos de cualquier incineradora, nuestra salud está en peligro porque toda la población está contaminada en un 90% a través de los alimentos. El Ministerio de la Ecología calcula que entre 1.800 y 5.200 personas mueren en Francia cada año por cánceres provocados por dioxinas [4] , y una de las principales fuentes de emisión de dioxinas son las incineradoras.
Pero las incineradoras no sólo matan provocando cáncer. Los estudios oficiales demuestran que también dispersan a su alrededor sustancias teratógenas (que provocan malformaciones congénitas). La ciencia vuelve a confirmar los temores: un estudio del Instituto Nacional de Salud e Investigaciones Médicas sobre las 70 incineradoras de la región Rhône-Alpes concluye que “globalmente, se observan riesgos significativos para la población para dos tipos de malformaciones: anomalías cromosómicas y otras malformaciones mayores” y “en el conjunto de malformaciones congénitas […] se observa una diferencia de incidencia muy significativa, con un riesgo mayor en la población expuesta después de la puesta en marcha de la incineradora”. El estudio también destaca en las proximidades de las incineradoras un “riesgo elevado y significativo […] de cavidad oral, displasia renal, megacolon tóxico y anomalías urinarias” [5] . Más estudios confirman estos resultados [6] .
En salud pública, la exposición crónica a un contaminante bioacumulable provoca enfermedades como el cáncer. Un niño que nace y vive en las proximidades de una incineradora durante sus primeros diez o quince años de vida se verá sometido a una dosis peligrosa. Sobre todo teniendo en cuenta que las nuevas normas sólo contemplan 20 contaminantes cuando una incineradora escupe millares de sustancias nocivas . Por ejemplo, no se tienen en cuenta los PCB, de los que la OMS estima que una vez que entran en los alimentos multiplican por tres las cifras que se dan para las dioxinas [7] .
La incineración de residuos:
– Disemina las sustancias nocivas, envenenando el medio ambiente, nuestros cuerpos y los alimentos.
– Produce cenizas tóxicas,.
– Destruye gran cantidad de recursos que podrían aprovecharse.
– Atenta contra el reciclaje y la prevención de la generación de residuos.
– Drena el dinero de la economía local para pagar una tecnología costosa.
– Genera muchos menos puestos de trabajo que los programas de gestión ecológica de los residuos.
[1] El estudio Incineración de residuos y salud pública, de la Sociedad Francesa de Salud Pública, 1999, se financió en parte con fondos de la Federación Nacional de Actividades de Residuos y de Medio Ambiente.
[2] Viel et al. Emissions de dioxines par l’usine d’incinération d’ordures ménagères de Besançon et risque de lymphome malin non-hodgkinien. Epidemiology, 2003, p.2
[3] E. Knox. Cancers chez l’enfant, lieux de naissance, incinérateurs et décharges, International Journal of Epidemiology, junio 2000.
[4] Comité de prévention et de précaution. Recommandation dioxines , 1998, p.10
[5] Risques de malformations congénitales autour des incinérateurs d’ordures ménagères, Inserm, 2002, p. 1 y 39.
[6] T. Dammer. Grossesses autour d’incinérateurs et de crématoires aboutissant à des enfants malformés, Journal of Epidemiology and Community Health, 2003.
[7] OMS: Evaluación de los riesgos de las dioxinas para la salud: nueva dosis diaria admisible, 1998, p.24
Fuentes: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=46127
Para saber más: http://www.ecologistasenaccion.org/article9000.html
Comments are closed, but trackbacks and pingbacks are open.